Historia del SoN Cubano





EL SON ES UN GÉNERO MUSICAL Y DE BAILE. ES SINÓNIMO DE RITMO Y CADENCIA, PRODUCTO DEL MESTIZAJE AFROCUBANO Y ESPAÑOL SU ESTRUCTURA MUSICAL EXISTE EN OTROS PAÍSES DEL CARIBE BAJO OTROS NOMBRES Y VARIACIONES. PERO AQUÍ HABLAREMOS DEL SON CUBA­NO, DE ESE RITMO QUE NACIÓ EN LA SIERRA ORIENTAL, LLEGÓ A LA HABANA, VIAJÓ POR El MUNDO Y DIÓ ORIGEN A LO QUE HOY CONOCEMOS COMO SALSA.

 

El son es lo más sublime para el alma divertir, se debiera de morir quien por bueno no lo estime“. La famosa frase de Ignacio Piñeiro es la más trillada cuando se escribe sobre el son cubano. Pero su genialidad refleja el humor, la ironía y la idiosincrasia del cubano orgulloso y defensor de su música y de su cultura.

Por ser de tradición oral, no se sabe con exactitud cuando nació el son cubano, la mayoría coincide que fue a finales del siglo XVIII, en tos zonas rurales de la cordillera oriental, y en especial en Santiago de Cuba, luego desembarcó en La Habana a principios del siglo y comenzó o popularizarse hacia 1920.

Como antecedentes del son cubano apa­recen el ñongo, el nengón y el changüí, de las zonas de Baracoa y Guanlánarno. También existen otras variantes como el son montuno y el sucu-sucu de la isla de los pinos, actual isla de la juventud. Posterior al son destaca el songo (son con música electrónica creado por Juan Fornell & Los Van Van) y, por supuesto, la salsa.

LA MÚSICA

Al principio, el son tradicional se interpre­taba con tres, bongó y marímbuto (instrumento de origen africano hecho con cajón y cuerdas). El solista era quien normalmente tocaba las maracas y la clave.

La gran evolución del son llega con Ig­nacio Piñeiro y su Septeto Nacional, entre 1926 y mediado de los años 30: se incorporó la trompeta y el contrabajo, se amplían las posibilidades musicales y literarias, y es el primero en realizar las fusiones con otros géneros: guajira-son, rumba-son, son-pregón, guaracha-son, bolero-so, etc., surgen temas como “Échale salsita’ y “Suavecito”, entre otros.

También destaca el gran Arsenio Rodríguez (que añadió dos trompetas, tumbadoras y piano, creando una nueva sonoridad), así como Miguel Matamoros, el conjunto de Chapotín, Las estrellas de chocolate y la gran Sonora Matancera. El otro gran "sollo" lo da el mítico Benny Moré, que en la década de los 50, influenciado por las Jazz Band, agiganta la orquesta y aporta su métrica imposible que le valió el apodo de “El bárbaro del ritmo”.

DE AMORES Y ODIOS

El son era música de negros y mestizos se dejaba escuchar en las centrales azucareras, en los puertos y en las fiestas populares. A principios de siglo, el son fue marginado por la alta sociedad cubana, lo tachaban de indecente y vulgar por el contenido sexual que se le daba al contoneo de los cuerpos entrelazados.

Pero la burguesía no tardó en dejarse seducir por el son que comenzó a bailarse en los salones. Como dicen los viejos señores cubanos “de cada baile de salón sale un amor”. Era época de galanteo de sombrero panamá y flor en la solapa. Lo que se consideró lascivo encerraba, entonces, el más puro romanticismo

AL SON QUE ME TOQUEN BAILO

Volviendo al presente, cuando un son se deja caer sobre una pista de baile pocos saben distinguirlo. En ocasiones alguien suele decir: “esa salsa es muy lenta”cuando lo que suena es un son cadencioso y sabrosón, que no admite piruetas ni acrobacias, sino cuerpo y alma.

Bailar “en clave de son* o “al dos“, no es tarea fácil. El oído suele irse al tiempo fuerte de la música y es como luchar contra corriente. Pero una vez que se siente, una vez que se descubre cómo hacerlo, es imposible bailar un son sin dejarse poseer por su cadencia. Sin embargo, lo que menos importa es bailar al “uno” o al “dos”, sólo se trata de sentir.

HABLANDO DE SON

El SON ES MÚSICA Y BAILE. PERO TAMBIÉN ES UN SENTIMIENTO. MÚSICOS Y BAILARINES CUBANOS, RESIDENTES EN BARCELONA, NOS CUENTAN LO QUE ES PARA ELLOS EL SON:

“Es el sabor más rico que tiene la música cubana, es cadencia, dulzura, sabrosura y un vaivén en las caderas que sirve para enamorarse, para decir cosas bonitas, si alguien está medio congorrión (deprimido) y escucha un son cubano se le alegra el alma”.
Yomito Sánchez (bailarina, coreógrafo y profesora de danza)

“El son es lo genuino de Cuba. Sincretismo de negros y blancos”.
Adelfa ‘la abuela del sabor’ (cantante, trombonista y pianista)

“Es una transportación o un sentimiento de alegría. Un viaje a otra dimensión en
la que hay goce, disfrute y comunicación con el otro. Es cúmulo de sentimientos se
proyecta a través de los cuerpos, tanto si lo escuchas como si la bailas”.
Carlos Enrique Aidltti ‘Coilitín’ (bailarín y profesor de salsa)

“Para mí el son es alma, vida, y alegría. Eso lo resume todo”.
Rogelio Loido (bailarín, profesor de danza, y director del Espacio Cultural Macusa)

“Es positivismo, mucha alegría, mucho color, sensualidad, vibración, pura vibración, eso es el son.
Orbe Oitiz (músico, productor y bajista de Radio Malango)

“Es la sabrosura, el disfrute, la elegancia, el galanteo del hombre con la mujer, la sensualidad, vivir la música y bailar la música. El son lo tiene todo, el mejor movimiento, el mejor compás. La esencia fundamental de la salsa es el son cubano, para mí es lo máximo”.
Ernesto Moré (bailarín y profesor de salsa y son)

“El son es el alma de Cuba, es la raíz del cubano. Cuando uno toca un son o lo escucha, es vivir lo que dejó atrás: su isla, el son es la música más original de Cuba, es la llave del corazón de los cubanos.
Sadyct Calderón (músico, cantante y director de Unión Habanera)

El son cubano es un género musical originario del este de Cuba, región popularmente conocida como región oriental u oriente cubano y que comprende las provincias de Guantánamo, Santiago de Cuba, Holguín, Las Tunas y Granma.

El músico y escritor Laureano Fuentes Matons recogió en su libro "Las artes en Santiago de Cuba" publicado en 1893 la canciónSon de la Ma´Teodora, considerándola como el primer son conocido. Esta canción aparece como escrita en Santiago de Cuba en 1562 por las hermanas Micaela y Teodora Ginés, dos negras libertas originarias de Santo Domingo.1 2 Por otro lado, historiadores como Alberto Muguercia y Danilo Orozco consideran equivocada esa afirmación, llegando incluso a poner en tela de juicio su existencia, considerándola como "apócrifa" y carente de documentos históricos que avalen su creación.3 No obstante, en el "Son de la Ma´ Teodora" reproducido por el cubano Laureano Fuentes Matóns en 1893, están presentes características del género del son cubano, como lo es el diálogo entre solista y coro.

Si bien presenta elementos de música bantú y española, el son surge en GuantánamoBaracoaManzanillo y Santiago de Cuba4 a finales del siglo XIX. Su origen está íntimamente vinculado al Changüi, considerado como el ritmo madre del son. En 1892, el tresista baracoense de ascendencia haitiana Nené Manfugás5 lo lleva del monte a los carnavales de Santiago de Cuba.6

El son llegó de Oriente a La Habana alrededor del 1909, traído posiblemente por los soldados del ejército permanente. El "Cuarteto Oriental" , creado en 1916 y que en 1918 se convirtió en en el Sexteto Habanero,7 estableció el formato de las bandas de son en lo adelante.

Con el establecimiento en la década de 1920 de la radiodifusión comercial, comenzó el auge y popularización del son, siendo el Septeto Nacional de Ignacio Piñeiro uno de los principales representantes de esta época. Piñeiro es el creador de Échale salsita, primera vez que se usó la palabra salsa para denominar a la música cubana.

El son evolucionó dando origen a otros géneros como el son montuno, el mambo y la salsa, aunque aún es interpretado por agrupaciones tradicionales en CubaPerúPuerto RicoVenezuelaColombiaEstados Unidos y República Dominicana.

INSTRUMENTOS

 

  Los grupos soneros originalmente estaban conformados por un tres cubano, (especie de guitarra de tres pares de cuerdas), bongómaracas y una Marímbula, que hacia las veces de bajo en el son tradicional cubano. Más tarde, se añadió guitarra, el Contrabajo sustituyó la marímbula y se adicionó la trompeta en 1927, elemento característico de la formación de los septetos de son.